Introducción

La creciente actividad en la exploración y explotación de hidrocarburos y gas en aguas profundas, ha puesto de manifiesto la necesidad de disponer de herramientas que, en caso de accidente, permitan determinar la deriva del derrame y prever su futura posición. La gran problemática asociada a este tipo de accidentes quedó demostrada en la explosión de la plataforma petrolífera Deepwater Horizon (Golfo de México, 2010).  A diferencia de otros derrames, el blowout se caracteriza porque son derrames continuos y prolongados en el tiempo y afectan a toda la columna de agua (desde el fondo hasta la superficie), pudiendo permanecer durante meses en el medio marino.

Actualmente, existen sistemas operacionales que proporcionan predicciones de las condiciones océano-meteorológicas a corto plazo (2-7 días), lo que permite predecir la evolución de un vertido en el mismo período temporal. Sin embargo, este horizonte de predicción resulta insuficiente para planificar de una manera eficiente la respuesta en accidentes en los que el vertido puede permanecer durante mucho tiempo en el mar, como es el caso de las explosiones en profundidad (blowout).

Los estudios en el medio-largo plazo (meses – 1 año) son escasos y están enfocados principalmente a la predicción de derrames en superficie, sin considerar su comportamiento tridimensional. Hoy en día, no existen metodologías que permitan predecir la evolución a medio-largo plazo de derrames de hidrocarburos en la columna de agua. Esta laguna en el estado del conocimiento ha sido abordada satisfactoriamente en el presente proyecto.